Esta tarde Fernando Alonso se ha proclamado campeón del mundo de Formula 1 por segunda vez consecutiva. Hoy era un día especial para muchos. El campeonato estaba casi en el saco para el español, pero aún existía una remota posibilidad de que se lo arrebatase Michael Schumacher, siempre que ganase el alemán y el español no puntuase. Día especial para muchos, porque Alonso se ha confirmado como el mejor piloto una vez más, además abandona Renault para marchar a McLaren, Schumacher ha corrido su última carrera, Michelin se despide por un tiempo de este deporte (con lo que Bridgestone llevará el monopolio de los neumáticos la próxima temporada) y quién sabe si también ha sido la última carrera de Pedro Martínez de la Rosa.
Todo estaba listo para que Fernando Alonso ganase en Brasil su segundo campeonato mundial. Sería el segundo en dos años, y con 25 años, una edad con la que nadie había ganado ningún campeonato, y él ya lleva dos. Las condiciones eran favorables para Fernando, simplemente con puntuar, el campeonato era suyo. No debía arriesgar, pues no era necesaria la victoria hoy. La salida parecía favorable para él, pero no para Schumacher, que partía décimo. Aún así se ha visto una salida espectacular del alemán, que lo arriesgó todo y se pegó al muro para avanzar posiciones. Al llegar a meta en la primera vuelta, se le echó encima a Fisichella, se pasó de frenada y reventó el neumático trasero derecho. Era el fin, Michael rodó toda esa vuelta con la rueda reventada, y paró a boxes a cambiarla. Se colocó último, con lo que sólo un milagro le haría ganar hoy. Por la parte alta no han habido muchos cambios. Bueno, Alonso se puso segundo tras parar todos en boxes en la primera parada. El objetivo de Fernando era claro: mantenerse arriba y no arriesgar, y sólo adelantar si la ocasión era obvia. Y casi sin esforzarse se colocó segundo detrás de Massa, que no perdió el liderato en ningún momento. Con el paso del tiempo, Michael Schumacher empezó a avanzar posiciones y adelantar a gente, hasta que se colocó entre los ocho primeros. De nuevo se cruzó con "Fisico", quien en un movimiento de novato, se pasó en la primera curva y le dejó pasar. Por desgracia para el alemán, quedaban muy pocas vueltas para intentar ganar la carrera, además, Alonso seguía segundo. Aunque no quería despedirse sin ganar. Finalmente ganó Felipe Massa, y era el primer brasileño desde Senna que ganaba en su casa. Su alegría fue máxima, tantas ganas tenía de ganar en su casa que su mono hoy eran de los colores de la bandera de Brasil. Lo festejó a lo grande. Y no menos Fernando, que al llegar a meta no pudo evitar emocionarse, y tras la visera seguro que se escondían algunas lágrimas de emoción. Y es que no todos los días alguien gana dos mundiales seguidos. ¿Es el sustituto de Schumacher? El alemán tomó el relevo de Senna hace años, y ahora es Alonso quien toma el relevo de Schumi.
Ha sido un mundial apasionante. Desde el principio dominó Alonso y se puso líder, ganando varias carreras consecutivas. El final del verano no fue bueno para él, con la famosa tuerca que se le salió en Hungría, y su retraso en boxes en Turquía. Eso hizo que Schumacher le empatase en el mundial, pero en estas dos últimas carreras, la mala suerte la ha tenido Schumacher, rompiendo en Japón y pinchando en Brasil. Sin embargo, Alonso ha demostrado que el mundial del año pasado no fue casualidad, y lo ha vuelto a hacer este año. ¿Es el comienzo de una era Alonso? ¿Volverá a ganar más mundiales? Tiene 25 años, y asegura que no se retirará mucho más allá de los treinta años. Aún así tiene tiempo de volver a disfrutar y ganar. A partir del año que viene lo hará con McLaren, y no sería de extrañar que le costase un poco amoldarse. Además, la marca anglo-alemana deberá mejorar sus prestaciones y fiabilidad, pues este no ha sido el año de Kimi. Y hablando del finlandés, será el sustituto de Michael en Ferrari. ¿Quién ocupará la segunda plaza en McLaren? La cosa parece entre De la Rosa y Hamilton. Ojalá hubiese un equipo de españoles, con Fernando y Pedro. Pero ya se verá. Ahora toca descansar a los pilotos, y prepararse para el año que viene, donde ya no estará Michael.
Gracias, Michael, por hacernos vivir los mejores años de Formula 1.
Gracias Fernando, por hacernos disfrutar y poner España en lo más alto de la Formula 1.
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